History repeats

1999 a year that marked my life ... I was still 15 years old and I was in 5th grade of high school, I had only been starting classes at school for 4 months and although my father César A. García Tafur was bedridden, I knew he was lucid, listening to us and watching us as we did our daily routines, surely wishing and longing to do the same in his dental office that he loved so much and made him happy. July 5th arrived, still his 54 years old, God decided it was time to separate and test our strength without him, he allowed me to feel his last breath and say goodbye with a kiss, still when his cheeks were hot.

Though we knew this was going to happen at any moment, you never want to be physically separated from your loved ones, because you'll simply never be able to hug them and hear their voice again, and that is an indescribable pain and emptiness that has accompanied me throughout various stages of my life.

1999 was my last year at school, the prom I dreamed of was being sabotaged by my mourning, we had to give an answer to the organizers and at that time participating in my prom was important to me, but there is a custom that when our parents die, you cannot dance until the year of their death, so I had resigned myself to not being present, but I perfectly remember that my mother called me and said: "Daughter, mourning is carried in the heart, you will participate in your prom", for being a mother raised with thoughts of yesteryear, she had a very modern mind.

I attended my graduation party in my red dress, the color we chose for our graduation, and I returned home with heels in hand because we danced so much that night. For a moment, I thought that dancing five months after his absence was showing my father that I was happy he was gone, and that people might criticize me for what I did.

Unfortunately, I was raised with the mindset of "What will people say?" as if there were a set pattern for living our life, simply because you have to please society. Pure hypocrisy!!! Because the pain that existed and exists in my heart had to be balanced with my outlook on life, if I didn't want to fall into the void.

Getting out of my comfort zone and going through many adventures taught me that as long as we have life, we should live it with joy, doing good to our neighbors and avoiding hurting people, because remember, everything turns around and even if you don't believe it, everything comes at a price in this life.

So, 25 years passed, and history repeats itself. On May 18, 2024, my brother César A. García Hidalgo was still 49 years old, and he died the year his only son finished his fifth year of high school. Coincidences? Family history repeats itself? I don't know.

The only thing I am sure of is that the pain of losing her father will deepen on special dates and she will yearn with all her heart that he were alive, she will want to see him and hear him even for a few minutes and she will pray for a sign of his presence,even if it is for a few minutes and he will pray to ask for a sign of his presence, we will probably coincide on the same dates, such as my 18th birthday, my graduation from high school and university, Father's Day, my wedding day, the day my first, second and third daughter was born, etc., days when he will feel like falling but there will always be a friendly hand that will lift him up or mine, if he so wishes.

Drafted: 04/11/24

La historia se repite 

1999 un año que marcó mi vida ... Aún tenía 15 años y estaba en el 5to de secundaria, recién llevaba 4 meses de empezar las clases en el colegio y aunque mi papá César A. García Tafur estaba postrado en cama, sabía que estaba lúcido, escuchándonos y viéndonos como hacíamos nuestras rutinas diarias, seguramente deseando y anhelando hacer lo mismo en su consultorio dental que tanto amaba y le hacía feliz. Llegó el 05 de Julio, aún con sus 54 años, Dios decidió que era la hora de separarnos y poner a prueba nuestra fortaleza sin él, me permitió sentir su último respiro y despedirlo con un beso, aún cuando sus mejillas estaban calientes. 

Aunque nosotros sabíamos que eso iba suceder en cualquier momento, uno nunca desea alejarse físicamente de nuestros seres queridos, porque simplemente jamás volverás a abrazarlo y escuchar su voz, y eso es un dolor indescriptible y un vacío que me acompaña y acompañó en varias etapas de mi vida. 

1 999 era mi último año en el colegio, la soñaba fiesta de promoción estaba siendo saboteada por mi luto, teníamos que dar una respuesta a los organizadores y en aquel momento participar de mi fiesta de promoción era importante para mí, pero existe la costumbre que cuando fallece nuestros padres, no se puede bailar hasta el año de su fallecimiento, así que me había resignado a no estar presente, pero recuerdo perfectamente que mi mamá me llamó y me dijo: «Hija, el luto se lleva en el corazón, participarás de tu fiesta de promoción», para ser una mamá criada con pensamientos de antaño, tenía la mente muy moderna. 

Participé de mi fiesta de graduación, con mi vestido rojo, color que elegimos para nuestra graduación y regresé a mi casa con los tacos en la mano porque bailamos tanto esa noche. Por un momento, pensé que bailar a 5 meses de su ausencia, era mostrarle a mi padre que estoy feliz por su partida y la gente podría criticarme por lo que hacía. 

Lamentablemente, me criaron con el pensamiento del «Qué dirá la gente», como si existiera un patrón establecido para vivir nuestra historia, simplemente porque debes agradar a la sociedad. Hipocresía pura!!! porque el dolor que existió y existe en mi corazón tenía que estar equilibrado con mi forma de ver la vida, si es que no quería caerme en el vacío. 

Salir de mi zona de confort y pasar por muchas aventuras me enseñó que mientras tengamos vida debemos vivirla con alegría, haciendo el bien a nuestro prójimo y evitar lastimar a las personas, porque recuerda, que todo da vueltas y aunque no lo creas, todo se paga en esta vida. 

Entonces, pasaron 25 años y la historia se repite, 18 de mayo del 2024, aún mi hermano César A. García Hidalgo tenía 49 años y fallece el año en que su único hijo terminaba su 5to de secundaria. Coincidencias? La historia familiar se repite? No lo sé. 

De lo único que estoy segura, es que el dolor de perder a su padre se profundizará en fechas especiales y anhelará de corazón que estuviera vivo, querrá verlo y escucharlo aunque sea por unos minutos y rezará para pedir una señal de su presencia, probablemente coincidamos en las mismas fechas, como por ejemplo en mi cumpleaños N°18, en mi graduación del colegio y universidad, día del padre, el día de mi matrimonio, el día que nació mi primera, segunda y tercera hija, etc , días que sentirá caerse pero siempre habrá una mano amiga que lo levantará o la mía, si así él lo desea.

Redactado: 04/11/24